La hechicera

Toda su vida fue llamada bruja. Ninguno se atrevió a llevarle la contraria, por miedo a sus conjuros y a la nigromancia. Ninguna se atrevió a hablar con ella, por pavor a que la asociaran a las técnicas mágicas y adivinatorias. Nada silencio su voz, ni las llamas de la hoguera a la que fue enviada hace pocos años. Nadie pudo contra ella, ni hombres ni mujeres. 

Microrelato creado para el Concurso de Diversidad Literaria - Ellas

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